Con un emotivo acto en la vieja bodega de la Estancia Jesús María, celebramos el Día de los Orígenes, a partir de la construcción -hace 401 años- de ese establecimiento jesuita, reconocido como el primer asentamiento permanente en la zona y preludio de lo que luego sería la fundación formal de Jesús María.
El festejo vino acompañado de un hermoso regalo: la recuperación y puesta en valor de un piano que allá por 1987 fue adquirido por la Asociación de Amigos de la Música y luego donado a la Municipalidad.
Artistas locales de la talla de Marita Freites, Carmen Moyano y Mario Cresta aludieron, desde distintas miradas, a la historia de ese piano y su recorrido de 30 años en el ámbito de la cultura local.
Luego llegó el momento en que Acosta, integrante de aquella Asociación de Amigos de la Música junto a Carlos Gigena, Ricardo Dibo y Mónica Cano, entre otros, volvió a sentarse frente al piano, para arrancarle las mejores melodías. Fue un momento mágico, que conectó a los presentes con la historia de la ciudad.
Además, la directora de Cultura, Soledad Castillo, anticipó que con ese instrumento en condiciones (fue afinado en Córdoba por un experto), más las recientes refacciones realizadas en la bodega por las autoridades del Museo Jesuitico, se genera un ámbito especial para la realización de futuros conciertos.
El acto fue encabezado por la intendente Mariana Ispizua, acompañada por el secretario de Gobierno, César Seculini, y el director del Museo, Carlos Ferreyra, entre otras autoridades.
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